Todavía recuerdo cuando salió al mercado. El mundo no estaba TAN globalizado ni la internet tan difundida así que cuando un dispositivo lograba tanta prensa y tanta venta en un país como Uruguay, de los mas pequeños y menos poblados del mundo, es porque se trataba de un fenómeno mundial a rajatabla.
Aparecieron aquellos extraños "huevitos" por todas partes: los originales, luego las copias... todo el mundo quería tener uno. Nadie sabía exactamente que era, pero todos querían probarlo. Algo así como el caviar o la mantequilla de maní. No tuvo edades, el target de público de los expertos en marketing de Bandai se fue al carajo. Al Tamagotchi lo compraban niños, adolescentes, adultos y hasta viejos que lo usaban para acordarse de tomar su mediación.
Bandai, esa legendaria marca japonesa creadora de la Wonderswan y mas recientemente de los Treasure Gaust Hunters, había introducido en el mundo una consola portátil (porque si, convengamos que ES una consola portátil y ES un video juego) que talaba de raíz el concepto mismo de video, de juego, de consola y de portátil con la consola portátil de video juegos mas innovadora desde el Game Boy de Nintendo, su eterno competidor.
Así como los Barcode Battler de Epoch supieron hacerle frente a Nintendo en Japón en el mundo portátil apostando a una idea alocada (un juego basado en códigos de barras sin gráficos) , Bandai le dobló la apuesta a nivel mundial con una consola que era mas chica que un huevo de gallina, con una pantalla dot matrix pero muy baja resolución y que para colmo tenía solo 3 botones.
Pero el concepto era fácil de entender y genialmente novedoso , atributos que cuando se conjugan causan los éxitos de venta. Si algo es demasiado novedoso pero nadie es capaz de entender de QUÉ se trata , fracasa. Si algo es demasiado sencillo de entender pero se parece mucho a conceptos previos también. Así lo definió Jack Trout el padre del posicionamiento: "el producto revolucionario presentado de modo sencillo y entendible" es la clave del éxito.
El Tamagotchi se define con dos palabras: VIDA VIRTUAL.
¿Vida virtual? Así es. El juego es criar , alimentar, pasear, entretener y limpiar a un pequeño monstruo que vivirá en tu pantalla. El te despertará con ruidos cuando tenga hambre o esté aburrido. El juego se desarrolla las 24 horas del día porque en realidad el Tamagotchi esta vivo... virtualmente. Actúa como un ser vivo, e incluso muere.
Con ese concepto tan sencillo como novedoso el Tamagotchi revolucionó no solo el mercado de las consolas portátiles sino de todos los videojuegos y hasta del Animé y del Manga. Notemos cuantos dibujos animados japoneses se basan en un chico que lleva en el bolsillo a un monstruo que vive dentro (Pokemón, Digimon, etc). Notemos también cuantos videojuegos y consolas se basan en el concepto de vida virtual.
El origen de los SIMS está en el Tamagotchi por lejano que parezca. También el origen de muchos juegos de rol y de toda la posterior generación de vida virtual que siguió con los guerreros virtuales, los cazadores virtuales y un sin fin de consolas portátiles basadas en el concepto de que algo está vivo con nosotros.
La VIDA VIRTUAL había llegado al mundo, un bicho capaz de entretenernos pero también molestarnos e incluso entristecernos con su muerte. Pesadilla de no pocas maestras de primaria, y objeto de burla de tantos otros por no mencionar que hasta objeto de estudio fue, lo cierto es que aún hoy día el TAMAGOTCHI en su última generación se sigue produciendo y vendiendo, tanto el Tamagotchi como sus sucesores directos: las consolas de vida virtual. Treasure Gaust (Bandai), Advance Pet (Capcom), Digimon, Pokedex (Jakks Pacific), Mushiking (Sega), Pokewalker (Nintendo) se siguen fabricando con el mismo concepto básico: un bicho vive en nuestro bolsillo.
Y ese bicho hoy cumple 15 años. Y es la prueba de que una consola portátil no depende de su potencia gráfica, ni del tamaño de su pantalla, ni de su enorme catálogo para divertir (objeto principal de un juego). Una consola puede ser barata, sencilla , tener un solo botón y la peor resolución del mundo y si el concepto conecta bien con nuestra esencia lúdica, y nos entretiene lo suficiente lo demás no importa. El tamagotchi fue un buen ejemplo. Y poca cosa hubo después del Tamagotchi tan novedoso que vos mismo al leer esto te preguntas: "¿Pero era una consola portátil?".
Como toda genialidad toca tanto el borde que parece que se cae. Fue como cuando Piazola compuso BALADA PARA UN LOCO. Preguntaban, ¿esto es un tango? ¡ Y vaya si lo era! Era la esencia misma del tango: la tragicomedia de la condición humana en un 2 x 4. Por eso tuvo un alcance universal en medio del rechazo local. Y el Tamagotchi tuvo el mismo alcance: latinos, gringos, asiáticos y europeos todos entendieron lo que era VIDA VIRTUAL y todos quisieron saber lo que era tener un monstruo creciendo en el bolsillo.
Scara
http://consolasportatiles.info
que no se te mera che dale bola 
muchas grasicas por el aporte scaramouche para mantenir vivo el recuerdo 
