Consola - Sega Master System
Genero - Plataformas
Jugadores - 1
Fecha de lanzamiento-junio 1988 (Japón) / diciembre de 1988 (EE.UU.)
Developer - Sega
Publisher – Sega
La historia
Los siglos 15 y 16 en el Japón feudal están llenos de historias de feudos, jefes de guerra que desean obtener control de los territorios que conforman hoy dicha nación, pero algunos no lo hacen con las mejores de las intenciones. Los shogunados que conformaban el bando norte se peleaban con el bando sur siglos antes, dando paso a sangrientas guerras por el control y aunque eventualmente hubo una tensa calma, el estatus quo se mantuvo gracias al poder del emperador Ashikaga Yoshimitsu.
La influencia de Ashikaga Yoshimitsu trajo consigo buenas y malas repercusiones; políticamente y económicamente, hubo mayor apoyo al gobierno de parte de poderosos dueños de terrenos, también se reforzó el poderío militar con familias de gran conocimiento bélico (los ji-samurai). En el lado negativo, la lucha de poderes por las distintas prefecturas dio paso a que otros poderosos jefes de guerra se animaran a controlar otras prefecturas, a como diera lugar. Estos terribles poderosos querían hacerse llamar “Daimyo”, incluso sin que un Shogun lo nombrara tal cual.
Entre tanto dimes y diretes político y feudal, un poderoso jefe de guerra, cuyo nombre era Yonensai”, se ensañó en obtener control de los terrenos para sí. Para lograr esto, Yonensai, junto a otros seis poderosos hechiceros, robaron cinco pergaminos secretos que tenían atributos mágicos, junto a estos pergaminos robaron también una poderosa espada, tan poderosa que era llamada “espada del Señor Dragón”. Una vez todos estos pergaminos en manos de tales hechiceros y la espada en manos de Yonensai, este se acomodó por voluntad propia en el castillo de Nobunaga Oda, en la prefectura de Edo y acomodó a los otros seis hechiceros en otras prefecturas. Desde allí, dirigió una invasión de Yōkai; seres malignos, espíritus, esqueletos, animales, todos de un proceder sobrenatural y con formas poco agradables.
La oportunidad de recuperar estos cinco pergaminos y la poderosa espada del Señor Dragón, se da a manos de un samurái de nombre Hayato; este no es solo un samurái, sino que tiene ascendencia de los dueños originales de la poderosa espada, por lo que esto no es tan solo una oportunidad de combatir el bien con el mal, sino que es la oportunidad de devolver el honor a la familia, de restablecer la paz y erradicar el gran nivel de opresión de manos de estos siete autoproclamados “Daimyos”.
El juego
Kenseiden es este típico juego de acción (plattformer) creado por Sega en el que controlamos a Hayato, un gran samurái que es dirigido a erradicar el mal de unos jefes de guerra que se han establecido en importantes prefecturas niponas y quienes se han apoderado de unos pergaminos mágicos y una espada súper poderosa. El control del personaje es sumamente básico; un botón para atacar con la espada o utilizar ítems especiales y otro botón para brincar. Para ese tiempo, con dos botones y un control direccional era más que suficiente. A pesar que comienzas con un Hayato con ataques simples o brincos cortos, conforme avanzas y obtienes los pergaminos robados, adquieres más y mejores formas de ataques o brincos más largos. Respecto al brinco, aquí vemos que la física del personaje en el juego a veces nos juega en contra, porque el brinco no se siente muy bien y el personaje parece que flota o que pesa mucho, lo cual hace a veces difícil controlar el personaje. Una vez en el juego, veremos que el nivel de dificultad es moderadamente alto y en todo momento hay hordas de enemigos que te quieren infligir daño, esto sin mencionar que en casi todos los stages, nos espera al final un boss.
A pesar de que una vez pases el primer stage, puedes ir a otras prefecturas libremente, aunque es bueno tener esa libertad y no hacerlo ciertamente lineal, es importante hacer el recorrido por las prefecturas que están antes de Edo y recuperar los pergaminos y la espada, porque si llegas directamente a Yonensai sin las habilidades que se te confieren con los pergaminos, te van a moler a palos. Esto es un cuasi-elemento RPG muy importante, porque no solo es un juego de hack-and-slash elminando monstruos y llegar al final; hay que obtener unos artículos importantes que nos ayudan para la pelea final. Si te matan, puedes continuar con una de dos formas: con un diario o con un código; si regresas con el diario, lo haces con la barra de vida complea y con todos los poderes, si lo haces con el código, te dan la mitad de la vida y tienes que recuperar los poderes que obtuviste en prefecturas anteriores. Por tanto hay que ser preciso y meticuloso con la manera en que se juega, hay que ser lo más preciso con atacar y no ser atacado y ser económico con la vida y no andar corriendo y atacando sin sentido porque te puede ir mal.
Gráficos y elementos visuales
Como buen juego de Sega Master, el juego se jacta de ser bastante vistoso. Aunque no tiene la mejor de las animaciones, hay buena fluidez en la pantalla, tanto Hayato como los enemigos los hicieron de buen tamaño y los enemigos se hicieron con buen detalle respetando el elemento folklórico japonés. Este juego tiene mucho elemento histórico y estético japonés y afortunadamente, cuando hace el brinco para nuestro mercado no pierde prácticamente estos ricos elementos visuales. En el juego podemos ver pagodas, casas de té, templos y cuanto Yōkai (apariciones, fantasmas, seres supernaturales, etcétera) que se acople a la historia.
Cabe señalar que los bosses en Kenseiden son, en su mayoría, personas o seres mágicos con importancia folklórica o figuras mitológicas japonesas; por ejemplo, el primer boss es Wanyūdō, el cual es un supuesto monje que tenía la virtud de transformarse en una rueda con fuego y en su centro se ve una cara demoniaca. Este se pasa entre el inframundo y nuestro mundo con dicha forma permanente una vez muere y se dedica a absorber almas para torturar. Otro personaje que debemos combatir es Benkei (Saitō no Musashibō Benkei), un grande y poderoso guerrero a quien le atribuyen folklóricamente poderes ocultos, le llamaban de niño "Oniwaka" o niño demonio/ogro", por los dientes protuberantes que tenía desde niño.
Música y sonido
Ah... el FM2413 Chipset, ¡qué diferencia hace! O sea, uno se ha acostumbrado a un Sega Master System fuera de Japón con un sonido ciertamente decente pero plano en su mayoría. El FM2413 chip añade un sonido profundo, con mejor sonido de percusión, un bajo riquísimo, entre otros elementos musicales que se aprecian mejor con el FM Chipset. Empero, aun sin el sonido FM, la música engancha y no pierde tempo aunque sea plano. Ya dejando los elementos técnicos del Sega Master, notaremos que la música y los sonidos en Kenseiden van muy acorde a la época del tipo Hougaku, aunque el intro tiene su toque de rock y algunos stages, pero lo que predomina es el sonido de elementos musicales típicamente japonés con ritmos más contemporáneos.
Fun Factor
Dentro de la buena pero limitada gama de juegos de Sega Master System, diría que este es uno de los que se destaca no necesariamente por un control que roma el molde, pero encaja bien en el género plattformer y los toques de elementos de búsqueda son la cherry sobre el postre. Ciertamente, el juego transporta muy bien con su época definida y en cierto sentido, no hace falta una historia tan profunda como la de Kenseiden para apreciar el buen juego que es. En una escala de diversión, le doy fácilmente una ubicación por encima del término “bueno”, diría que es bastante decente. Hubiese sido excelente si el brinco de Hayato fuera más fluido, no critico tanto el nivel de dificultad que está algo por encima de lo moderado porque eso es el reto que ofrece el juego dentro de las posibilidades de jugar no lineal.
Curiosidades
Entre las curiosidades que podemos mencionar, están:
[*] Alex Kidd hace una aparición en el stage 2, se ve su figura entre los esqueletos que están en la pared.
[*] Hayato en la versión de Mark III tiene el pelo rubio, mientras que en la versión americana tiene el pelo negro. El pelo rubio quizás se deba a darle un matiz de anime al personaje. Al final del juego, Hayato aparece con el pelo castaño.
[*] La curiosidad más interesante de Kenseiden es la versión coreana de este juego. En Corea se titula Hwarang-ui Geom (화랑의 검), que se traduce a algo así como “Espada del Caballero de Flor”. No se dejen llevar por el título de caballero de flor; en Corea, existió este grupo de hombres de letras llamados “Hwarang”, que según la historia, también pudieron ser grandes guerreros que dominaban artes marciales antiguas, de las que según se cree, provienen a su vez otros tipos de artes marciales modernos (quizás el nombre de Hwarang les sea familiar para la serie de Tekken, personaje que domina la disciplina del taekwondo). No solo al personaje principal le hicieron un cambio estético y le pusieron un traje coreano, sino que al juego le despojaron todo lo que sea alusivo al tema japonés de la era feudal, incluso el mapa del juego es del país de Corea.